Tener la piel seca es algo que representa un problema para muchas personas en el mundo y cada día esas personas buscan soluciones. Incluso muchas veces no sabemos exactamente por qué motivo tenemos la piel seca. Por fortuna esas dudas llegarán a su fin justo ahora porque en este artículo te ayudaremos a dejar de tener la piel seca.
Si deseas saber el motivo por el que tienes la piel seca encontrarás la respuesta más adelante en este artículo. Además de algunos consejos excelentes para dejar de tener la piel seca en poco tiempo y de manera fácil y económica. Incluso te brindamos información muy útil respecto a cómo puede prevenir que tu piel se seque más adelante.
¿Por qué Motivo se Seca la Piel?
La principal causa de la piel seca es la falta de hidratación en la piel junto con la falta de lípidos dentro de la misma. Esto tiene como causante a varios aspectos externos como el calor o el exceso de frío. Por otra parte, se cree que algunos aspectos como el estrés o algunas enfermedades influyen en esto.
Además de lo antes mencionado también influyen factores genéticos en cuanto a la piel seca. También influyen factores como la edad debido a que con el tiempo las glándulas de la piel comienzan a trabajar mucho más lento. De esta forma la cantidad de grasas que llega a la piel por medio de estas glándulas es mucho menor.
Por otra parte tenemos la alimentación de cada individuo y como ésta le aporta grasas a su cuerpo. Muchos alimentos han demostrado traer aportes muy buenos para dejar de tener la piel seca. Ya que son alimentos que hidratan mucho la piel y fomentan la producción de grasas y aceites naturales de la piel.
Como Puedes Recuperar el Equilibrio de la Piel
Tal y como mencionamos previamente una alimentación equilibrada puede favorecer mucho a recuperar el equilibrio de la piel. Del mismo modo, tener una vida serena y libre de estrés contribuye a que la piel muestre un mejoramiento en su nivel de hidratación. Ya que el estrés suele causar desequilibrios hormonales que causan sequedad en la piel.
Aunado a esto podemos hacer uso de algunos productos cosméticos diseñados para mantener una piel sana. Esto es recomendable tanto para personas jóvenes como mayores ya que el cuidado de la piel debe hacerse a cualquier edad. De esta forma se previene que el deterioro de la piel se de a muy temprana edad.
6 Consejos para Dejar de Tener Piel Seca
Si tienes la piel seca y deseas saber cómo puedes hacer que vuelva a tener una textura sana y humectada debes seguir los siguientes consejos. A continuación tendrás varias opciones de métodos altamente efectivos para tener una piel mucho más sana.
1. Humectar la Piel Diariamente
Uno de los principales hábitos que debes adoptar si quieres tener una piel con mayor retención de agua es la humectación diaria. Para ello puedes usar múltiples ungüentos y cremas tanto caseras como industriales. Te aconsejamos humectar tu piel especialmente antes de dormir, ya que esto te conseguirá algunos beneficios adicionales.
2. Exfoliar la Piel para Eliminar el Exceso de piel seca
La exfoliación de la piel es un hábito que debe ser frecuente en tu rutina si quieres que tu piel tenga una mejor textura. Ya que este proceso ayuda a liberar los restos de células muertas que se quedan atrapadas en la superficie de la piel. Por lo cual agrega una textura mucho más suave y agradable a la piel.
3. Usar Productos Suaves de Limpieza
Para hacer que tu piel recupere una textura mucho más sana debes limpiarla con productos y artículos más suaves. Es decir, utilizar jabones faciales o de cuerpo que no cuenten con fragancias intensas o colores artificiales. Porque estos productos están libres de componentes químicos fuertes que pueden maltratar la piel.
4. Cambiar los Malos Hábitos de Baño
Los hábitos que tenemos cuando nos bañamos influyen mucho en la textura que tiene nuestra piel. Por lo que si quieres que tu piel sea mucho más sana debes cambiar tu rutina de baño por una mucho más saludable y con mayores ventajas.
Uno de los primeros malos hábitos a modificar es no pasar demasiado tiempo en la ducha. Ya que el exceso de agua durante la ducha puede eliminar el sebo y los aceites naturales de la piel. Del mismo modo utilizar el agua tibia para el rostro y evitar usar agua demasiado caliente o demasiado fría ya que esta puede causar daños.
5. Utilizar un Humidificador
En zonas donde el aire es muy seco y la humedad natural escasea se recomienda utilizar un humidificador. Ya que este mantiene controlados los niveles de humedad en el hogar y también favorece la humedad en la piel. También se recomienda por ser una opción mucho más sana para la piel que los aires acondicionados o los sistemas de calefacción.
6. Utilizar Medicamentos
En caso de que las anteriores alternativas no acabaran siendo fructíferas y continúes teniendo la piel seca debes acudir a un dermatólogo. Ya que estos profesionales pueden darte indicaciones mucho más precisas dependiendo de lo que tu piel requiera. De este modo te recetarán medicamentos, cremas o ungüentos ideales para tu piel.
Rutina Facial Diaria para el Cuidado de la Piel del Rostro
Lo primero que debes hacer al comenzar el día es lavarte la cara con abundante agua y jabón normal. Esto te ayudará a retirar toda la suciedad acumulada durante la noche. Luego puedes aplicar una ampolla o producto que te ayude a equilibrar los niveles de pH de la piel. Después de esto puedes aplicarte una crema hidratante.
Si en tu día vas a estar expuesta a la luz solar te aconsejamos que utilices un protector solar antes de salir. Es importante que le des tiempo a tu piel de absorber el protector antes de exponerte al sol. Ya que esto le dará una mayor efectividad a la protección que brinda la crema.
Cómo Prevenir la Piel Seca
Para prevenir que tu piel se ponga seca puedes hacer algunas cosas dentro de tu rutina diaria. A continuación te mostraremos una lista de consejos útiles para prevenir la resequedad en tu piel de ahora en adelante:
- Usa protector solar diariamente.
- Usa productos suaves para limpiar tu piel.
- Lava tu rostro con frecuencia.
- No uses agua fría ni caliente, lava tu rostro con agua tibia.
- Bebe agua con frecuencia.
- No te expongas demasiado al sol.
- Usa un humidificador.
